La cocción al vapor es un método de cocción con calor húmedo que cocina los alimentos rodeándolos con vapor caliente en un ambiente cerrado. Es una técnica de cocción particularmente saludable y efectiva porque los alimentos como las verduras retienen sus nutrientes, a diferencia de cuando se cuecen a fuego lento y los nutrientes pueden filtrarse. Además, no se necesita grasa ni aceite para este método de cocción. Pruébalo con judías verdes u otras verduras, hojas de acelgas rellenas, albóndigas asiáticas y más.
Hay varios tipos diferentes de estufas y vapores eléctricos. Esta guía debería darle algunas opciones para elegir la versión correcta para sus necesidades.
Características y opciones del vaporizador
Los vapores vienen en dos variedades: eléctricos o de estufa. La vaporera de la estufa es un inserto que cabe dentro o encima de una cacerola u otra olla que se llena con una pulgada o dos de agua hirviendo. La comida se coloca en el inserto, y la base perforada del inserto permite que el vapor rodee y caliente la comida. Estos tipos de vapores se pueden encontrar en las siguientes formas:
- Plataformas elevadas plegables o plegables (a menudo hechas de acero inoxidable o silicona) que se sientan en el fondo de una olla Una bandeja metálica perforada que anida en una cacerola similar a una caldera doble Una cesta de bambú que puede descansar en un wok.
Mientras tanto, los vapores eléctricos se pueden encontrar con bandejas perforadas apilables o divididas para que grandes cantidades de alimentos o diferentes tipos de alimentos se puedan cocinar al vapor al mismo tiempo. Se agrega agua a una cámara, y un elemento calefactor calienta el agua hasta que se convierte en vapor. Algunos electrodomésticos, como las ollas arroceras o las ollas múltiples, tienen una función de vapor. Las ollas a presión eléctricas o las ollas a presión de estufa a menudo incluyen una bandeja de vapor y se pueden usar como una vaporera.
Consejos al vapor:
- Los mejores alimentos para cocinar al vapor son proteínas tiernas como los filetes de pescado magro; pechugas de pollo deshuesadas y sin piel; y vegetales. Corte las verduras en trozos del mismo tamaño para que se cocinen de manera uniforme. Asegúrese de agregar suficiente líquido al vaporizador para que dure todo el tiempo de cocción al vapor; si necesita agregar más agua, la temperatura bajará. Asegúrate de revisar el nivel del agua ocasionalmente, especialmente para un vaporizador de estufa, para asegurarte de que tu olla no esté hirviendo, lo que chamuscará la olla y podría dañarla. Organiza grandes piezas de comida, como albóndigas o filetes, en un capa única, dejando un pequeño espacio entre cada pieza para permitir que circule el vapor. Para verduras como el brócoli o las judías verdes, apilarlas sin apretar en la vaporera. Lo importante es que hay espacio alrededor de los alimentos para que el vapor pueda circular; de lo contrario, ciertas partes podrían no cocinarse de manera uniforme. Evite retirar la tapa con demasiada frecuencia para controlar los alimentos, ya que esto hará que la temperatura baje. Por esta razón, una tapa de vidrio es útil, aunque a menudo se llenará de condensación, lo que hará que sea difícil ver el interior. Cuando abra la vaporera, abra la tapa lejos de la cara y las manos; el vapor caliente puede causar quemaduras. Los alimentos se pueden sazonar sutilmente agregando ingredientes aromáticos a su agua humeante. Pruebe hierbas, té, cebollas o puerros. O puede hacer una salsa sabrosa para servir con la comida.