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Las infusiones se usan en muchas bebidas para agregar sabor a la bebida. De hecho, es cómo hacemos muchos tés y el proceso no podría ser más simple. Si ha preparado té, entonces ha hecho una infusión.
Infusión
Por definición, una infusión es una bebida hecha al colocar un ingrediente aromatizante (como té o hierbas) en un líquido (como agua caliente). Las infusiones son el método más popular para preparar tés y tisanas.
Esta preparación de té o "té de hierbas" también se llama elaboración de cerveza y generalmente implica:
- Verter agua caliente sobre la materia vegetal (como hojas secas o bayas). Esperar durante un período de tiempo (llamado remojo). Luego retirar la materia vegetal antes de beber.
La palabra infusión también puede referirse a la bebida infundida en sí. A veces se usa para referirse específicamente a las tisanas, que pueden llamarse "infusiones de hierbas", pero también puede referirse a tés verdaderos.
Las infusiones también se usan al hacer licor con sabor en casa. La más popular es una infusión de vodka, que se puede condimentar con una variedad de frutas, hierbas y especias. En lugar de depender del calor, el alcohol extrae el sabor, y estas infusiones tardan más, a menudo se extienden a una semana o más, dependiendo del sabor.
Del mismo modo, también puede infundir sabor en edulcorantes como jarabes simples y miel. Estas son una buena manera de agregar su sabor endulzado favorito a cualquier bebida.
Infusión vs. Decocción
El método de infusión difiere de una decocción en que el agua no se calienta o hierve continuamente a medida que la materia vegetal se remoja. Esto puede resultar en una bebida más débil pero es necesaria para extraer los sabores de algunos ingredientes.
Algunas bayas, cortezas y raíces necesitan calor adicional para sacar el sabor de la superficie más dura, por lo que se utiliza una decocción.
Consejos
- Presta atención al momento de tu infusión particular. El tiempo es clave para obtener el sabor justo de tus tés y tisanas. Muchos tés han recomendado tiempos de preparación, y debe seguirlos. Una temperatura no se ajusta a todos los tés. Los diferentes tés requieren diferentes temperaturas para optimizar su sabor. En general, cuanto más ligero es el té, menor es la temperatura. Por ejemplo, los tés verdes como 150-180 F, mientras que los tés negros son mejores a 200-212 F. Recuerde, el sabor es subjetivo. El hecho de que un determinado té deba elaborarse durante un tiempo determinado, no significa necesariamente que así sea como le gustará. Cuando encuentre un té que le guste, siga las recomendaciones y luego ajústelo a su gusto. Para una preparación más fuerte, use más hojas en lugar de más tiempo para evitar cualquier amargura. Es mejor dejar las ollas y recipientes de aluminio fuera de su experiencia de preparación de té. Con ciertas hierbas utilizadas en tisanas y algunas mezclas de té, el metal puede reaccionar con la hierba y crear una bebida tóxica. Para evitar esto, no compre ni use herramientas de aluminio para ninguno de sus tés.